contenido-principal-primeros-pasos

Primeros pasos

Residir y trabajar en el extranjero es una experiencia emocionante e enriquecedora. Sin embargo, Holmes y Rahe (1976) han definido los 43 acontecimientos vitales más estresantes en la vida adulta. Entre ellos, encontramos “Cambio de residencia”, “Cambio de trabajo”, “Cambio en las condiciones de vida” o “Cambios de actividades sociales y de ocio”.

Para que puedas enfrentarte a los primeros pasos de tu viaje, proponemos seguir los siguientes pasos. ¡Adelante!

1. Define un objetivo

Tener una meta clara te ayuda a centrar esfuerzos, definir un plan de acción que te acerque a lo que te propongas y retroalimentar la motivación a lo largo de todo el proceso. Para definir un objetivo recomendamos seguir la técnica SMART, un acrónimo de Specific, Measurable, Attainable, Relevant y Timely (Es español: específico, medible, alcanzable, relevante y temporal)

“Quiero trabajar en Australia como Arquitecto Técnico” es un objetivo mal formulado. Siguiendo la técnica SMART, un ejemplo correcto sería: “Quiero mudarme a Sídney (Australia) y trabajar como Site Manager en una empresa constructora antes del 1 de diciembre de 2026”

Formula el objetivo en positivo, proponte algo retador y escríbelo en un lugar visible para que lo puedas ver con frecuencia.

2. Elabora tu análisis DAFO

El análisis DAFO (Debilidades, Amenazas, Fortalezas y Oportunidades) es una herramienta que te permite considerar todas las dimensiones de tu objetivo y enfrentarte a la toma de decisiones de manera estratégica. Recomendamos hacer un análisis de este tipo cuando te encuentres en un proceso de emigración.

img-dafo

Enumera e identifica en tu matriz DAFO cada uno de los factores relacionados con el objetivo planteado.

Siguiendo con el ejemplo anterior, estas son algunas de las circunstancias que se podrían dar:

  • Debilidades (Factores internos a mejorar): Falta de experiencia en proyectos internacionales.
  • Fortalezas (Factores internos a potenciar): Nivel de inglés alto y buena capacidad de adaptación.
  • Amenazas (Factores externos a controlar): Desconocimiento de la legislación de construcción australiana.
  • Oportunidades (Factores externos a aprovechar): Baja tasa de desempleo y amigo de la infancia residiendo allí.

3. Contacta con organismos e instituciones

¿Con qué apoyos puedes contar? Existen diferentes organismos que cuentan con servicios, asesoramiento y programas para españoles que deciden trabajar en el extranjero o ya han emigrado.

4. Elabora un plan de acción

Ya tienes un objetivo, conoces las circunstancias que influyen en tu decisión y todos los pasos a realizar antes de emigrar. Ahora es el momento de realizar un inventario con todos los recursos necesarios para cumplir el objetivo. Algunos ejemplos más frecuentes en el inventario son: ahorrar, realizar trámites para residir, buscar trabajo, actualizar LinkedIn, contactar con conocidos en el país de destino, comprar un nuevo teléfono móvil, inscribirte en un curso intensivo de inglés, etc.

Para acabar, distribuye las diferentes tareas en el tiempo. Revisa periódicamente que estés cumpliendo con el plan previsto.

5. Trámites generales

Independientemente del país de destino, hay unos trámites que son comunes para cualquier profesional que decide emigrar. ¡Toma nota! (Los trámites específicos para residir y trabajar los puedes encontrar en la información del país de destino)

  • Pasaporte y legalización de documentos
  • Vacunación
  • Carnet de conducir
  • Registro de matrícula consular
  • Contratación de telefónica y apertura de cuenta bancaria

img-planifica-viaje