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Trámites para residir en Japón
Entrada al país
Todo ciudadano español que se traslade a Japón para fijar en el país su residencia habitual debe inscribirse en el Registro de Matrícula Consular (RMC) de la Embajada como residente. Igualmente, se recomienda la inscripción en dicho Registro, como "no residentes" o "transeúntes", a aquellas personas que vayan a pasar una temporada en Japón, aunque no establezcan su residencia en el país. Esto es especialmente importante en países con riesgo de catástrofes naturales ya que permite que en caso de activarse programas de emergencia se pueda contactar por parte de la Embajada con todos los españoles de la demarcación consular de forma rápida y eficaz.
Visados
El primer paso para solicitar un permiso de trabajo en Japón es encontrar un patrocinador, que suele ser una entidad empleadora. La empresa deberá patrocinarte y proporcionarte una carta de oferta detallando los términos y condiciones del empleo.
Después de obtener la visa de trabajo, puedes viajar a Japón. Una vez en Japón, deberás registrarte en la oficina local de inmigración dentro de los 14 días posteriores a tu llegada y obtener tu tarjeta de registro de residente.
Japón tiene cerca de 30 diferentes permisos de trabajo y visas a largo plazo basadas en el trabajo de los expatriados y la razón por la que se mudaron a Japón. Hay visas de trabajo específicas para ocupación, incluidas opciones para artistas, instructores, periodistas, profesores, trabajadores calificados, etc. El tipo de permiso que solicite una persona empleada determinará cuánto tiempo puede permanecer en Japón. Por lo general, la duración varía de tres meses a cinco años.
Además de los permisos de trabajo para ocupaciones, Japón introdujo recientemente visas de habilidades específicas, que incluyen:
• Visa de trabajador cualificado específico: esta visa es para trabajadores extranjeros que vienen a Japón para llenar vacíos de empleo en ciertos sectores laborales. Japón espera traer aproximadamente 500.000 nuevos trabajadores extranjeros al país para 2025.
• Visa de habilidades específicas 1-SSV1: Solo los trabajadores cualificados en industrias específicas, como la construcción naval, la agricultura, la atención de enfermería y algunas otras, pueden solicitar esta visa. Requiere pruebas de idioma japonés y exámenes técnicos. La visa es válida por un año y renovable hasta cinco años. Si un solicitante desea permanecer más de cinco años, deberá solicitar la visa 2-SSV2.
• Visa de habilidades específicas 2-SSV2: Los solicitantes pueden renovar esta visa indefinidamente y llevar a sus familiares a Japón. Las personas que actualmente viven y trabajan en Japón con una Visa 1-SSV1 pueden solicitar esta visa específica solo después de obtener un mayor nivel de especialización en su campo.
• Visado Working Holiday (Vacaciones y Actividades Laborales Esporádicas): Con el Acuerdo sobre Working Holiday Scheme entre Japón y España firmado en 2017, el Gobierno de Japón posibilita a un número determinado de ciudadanos españoles a permanecer en Japón hasta un año con el objetivo principal vacacional, pudiendo trabajar durante un cierto periodo para cubrir los gastos de su viaje.
Los solicitantes deben pagar una tarifa por el tipo de visa de trabajo japonesa que solicitan. La tarifa depende del tipo de visa, la nacionalidad del solicitante y si desea un proceso de entrada única o múltiple. Por lo general, una visa de entrada única cuesta alrededor de JPY 3.000 y una visa de entradas múltiples cuesta JPY 6.000.
Sanidad
Toda persona residente en Japón ha de inscribirse en un seguro médico público (el Kenko Hoken o el Kokumin Kenko Hoken), tras lo cual pagará, por lo general, el 30% de los gastos médicos. Es muy recomendable, para los viajeros, hacerse con una cobertura privada de accidente y enfermedad, que incluya gastos de repatriación.
Japón reconoce el derecho a la asistencia sanitaria en el marco del Sistema Nacional de Salud en España para los españoles de origen residentes en Japón y para sus familiares beneficiarios, tanto cuando retornan como en sus desplazamientos temporales a España. Dicho derecho, por tanto, pasa a incluir a: trabajadores por cuenta propia, además de pensionistas y trabajadores por cuenta ajena; cónyuges y parejas de hecho de los españoles de origen titulares del derecho; hijos hasta los 26 años de edad y mayores discapacitados que convivan y dependan económicamente del titular.
Existe un convenio de Seguridad Social entre España y Japón (en vigor el 1 desde diciembre de 2010). Dicho acuerdo se limita a facilitar el trasvase de cotizaciones a efectos de pensiones y de prestaciones de incapacidad permanente, muerte y supervivencia no derivadas de accidente de trabajo o enfermedad profesional, pero no cubre cuestiones relativas a la asistencia sanitaria.
Las condiciones sanitarias de Japón son buenas. Los médicos y los hospitales japoneses tienen buena reputación. Uno de los problemas con que se encuentran los extranjeros es el idioma, ya que no muchos médicos y enfermeras hablan inglés, aunque existen hospitales que sí cuentan con personal capaz de manejarse en dicho idioma.
Encontrar vivienda
Encontrar vivienda en Japón puede ser un proceso desafiante, especialmente para los extranjeros.
Existen tres tipos de vivienda en Japón: viviendas alquiladas en el mercado privado, vivienda subvencionada con fondos públicos y vivienda comprada en el mercado privado.
En el caso del alquiler, es importante recalcar que el agente inmobiliario suele lleva una importante comisión (lo habitual es un mes de alquiler). Además, hay algunos costes que puede ser necesario tener que añadir, como son el shikikin (el depósito para el alquiler) o, en su caso, el koshinryo" (coste de renovación del contrato). El contrato habitual tiene una duración de dos años, aunque es negociable, igual que el pago del llamado key money. Generalmente, a los extranjeros se les pide la tarjeta de registro, certificado de ingresos mensuales y un avalista japonés que se haga cargo en caso de impago.
En Japón, es común utilizar un sistema de garantía de alquiler (hoshōkin) o un fiador (hoshōnin) al firmar un contrato de alquiler. Esto puede implicar el pago de una suma adicional como garantía o la necesidad de encontrar a alguien que actúe como fiador.
Hay varios portales en línea donde puedes buscar vivienda en Japón. Algunos de los más populares incluyen Suumo, Homes y Real Estate Japan.
Trabajar con una agencia inmobiliaria puede facilitar la búsqueda de vivienda en Japón, especialmente si no hablas japonés o no estás familiarizado con el proceso. Las agencias pueden ayudarte a encontrar opciones que se ajusten a tus necesidades y negociar contratos de alquiler.
Por otra parte, una vez concluida la búsqueda de vivienda tendrá usted que empadronarse en el ayuntamiento correspondiente a su lugar de residencia. Tanto aquellas personas que establezcan por primera vez su residencia en Japón como aquellas que realicen un cambio de domicilio en el país deben notificarlo a la oficina municipal correspondiente del lugar en el que se instalen en un plazo de dos semanas.